A principios de los años 40 ya se estaba investigando una manera de poder realizar la purificación de los riñones en pacientes con distintas dolencias. Un médico holandés, Willem Johan Kolff, creó un dispositivo a partir de objetos reciclados denominado, “riñón de tambor giratorio”, empezando a ser operativo en 1945 después de varios ensayos.

En Venezuela los doctores Julián Morales Rocha y Ramón Viso Pittaluga, encomiendan a Luis Caballero Mejías para fabricar un aparato basado en el modelo de Kolff, quien conjuntamente con uno de sus profesores, Elio Rojas, de la especialidad de mecánica, lo construyen en 1948 en la Escuela Técnica Industrial.

Los galenos iniciaron las pruebas de su funcionamiento en animales, y posteriormente en humanos, en varios centros hospitalarios: Hospital Militar,  Vargas y Carlos J. Bello de Caracas. En este último se siguió usando hasta el año de 1950.


Dr. Julián Morales Rocha    
Dr. Ramón Viso Pittaluga


Primeros aparatos para la diálisis, algo parecido se debió construir en la ETI.